Es programador y consiguió trabajo sin ciudadanía europea: conoce la historia de Daniel en Berlín

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Daniel Kravetz (29), oriundo de La Plata y Analista de Sistemas, se mudó a Berlín en octubre del 2018, aunque confiesa que quería irse de Argentina al menos dos años antes. Esperó a que su entonces pareja terminara su carrera para poder partir.

En su caso, los motivos por los cuales decidió abandonar el país son muy claros y apuntan a los problemas económicos y de inseguridad: “Me cansé de que me roben a punta de arma, me cansé de que mi sueldo siempre se devalúe pese a recibir aumentos, me cansé de necesitar aumentos por ajuste inflacionario como algo habitual, me cansé del incremento en la violencia de los robos; pero por sobre todas las cosas, me cansé de que la gente (incluyéndome) se acostumbre a todos los problemas y los considere como algo rutinario y normal”, expresa enfático.

Es así que, desde Argentina, comenzó a buscar trabajo y a tener entrevistas con empleadores que se involucraran con el proceso de re-ubicación de empleados del extranjero. “La realidad es que era un 50/50 entre Ámsterdam y Berlín, porque al ser diabético quería elegir un país que tenga un buen sistema de salud pública”, aclara Daniel. La buena noticia llegó a los dos meses de buscar trabajo: lo contrataron como programador en una empresa de Berlín.

-¿Qué documentación tuviste que preparar antes de viajar? ¿Tenés ciudadanía europea?

Solamente tengo ciudadanía Argentina. Tuve que legalizar y apostillar mis títulos secundarios y terciarios, traducirlos al alemán con la apostilla, recibir una carta de una entidad burocrática alemana en donde aceptaran que mi empleador contrate personal no-europeo por falta de candidatos locales, y solicitar una visa laboral en la embajada alemana.

El proceso de re-ubicación es largo y tedioso, pero no es nada imposible de realizar. Es significativamente más sencillo y predecible que el proceso necesario para recibir un título universitario de una universidad pública argentina.

-¿Cómo fueron tus primeros pasos en el destino?

-Una vez que llegué a Alemania, lo primero que hice fue convertir mi visa laboral en una residencia (normalmente dura de 1 a 3 años), registrar el domicilio y registrarme con una obra social/cobertura médica.

Aunque mi empleador tenía un convenio con dos empresas diferentes para ayudar en la re-ubicación de personal, hubo un “malentendido” de la empresa a cargo de conseguir departamentos temporales, por lo que tuve que buscar por internet. No fue difícil, pero fue caro, y el departamento era realmente demasiado pequeño para considerarlo un lugar de medio o largo plazo.

Daniel, dando una presentación en Berlín.
Foto de Daniel Kravetz en Flikr

-¿Y qué nos podés decir sobre otros aspectos del día a día, como el transporte y el trato con la gente?

-El transporte público es bastante sencillo. Si bien hay más opciones, decidí pagar una suscripción anual que incluye todos los medios de transporte (subte, tren, colectivo/micro, ferry y tranvía).

En cuanto al trato con la gente es, y continúa siendo, la parte más sencilla. La gran mayoría sabe que el idioma alemán es difícil y hace un esfuerzo para entender y explicar. No es raro que la gente cambie automáticamente al inglés para simplificar una conversación. Dicho eso, para todos los trámites burocráticos, es muy probable que sí o sí el proceso sea en alemán.

-Con respecto al idioma, ¿te fuiste de Argentina con conocimientos básicos? ¿Cómo fue tu proceso de aprendizaje desde que llegaste hasta ahora?

-Hice un mes de clases intensivas en Argentina, pero continué mis estudios en Alemania. En marzo del 2020 iba a retomar las clases intensivas, pero claramente tuve un cambio de planes como todo el mundo.

Normalmente no tengo problemas para socializar, pero soy insistente para aprender.

Las compras, incluyendo los supermercados, al principio fue bastante complicado por tener que traducir los nombres de absolutamente todo, y recurrir a mirar las etiquetas y dibujos de los distintos productos, pero en poco tiempo se convirtió en algo sencillo y cotidiano.

En este momento puedo hacer trámites y tener conversaciones básicas. Mi vocabulario es limitado, pero estoy en condiciones de preguntar qué significa algo que no entienda en alemán, escuchar la respuesta y entenderla.

-¿Qué nos podés comentar acerca de tu trabajo?

Ahora trabajo como programador en una empresa de pagos móviles, es un empleo de jornada completa. Antes de la pandemia iba en transporte público hasta la oficina en el centro. Si no llovía, iba en bicicleta. Hasta el día de hoy trabajo exclusivamente en inglés como lenguaje oficial, independientemente de qué idiomas hable el resto del equipo.

-¿De qué forma impactó el coronavirus en tu vida diaria y en la del resto de la gente?

-Mi trabajo, al igual que el de muchos otros, se convirtió en algo totalmente remoto, aunque las oficinas siguen abiertas para quién las necesite, acorde a las regulaciones actuales. Estamos en cuarentena desde diciembre, que se sigue extendiendo de a poco, pero nada similar a lo que sucedió en otros países.

Están prohibidas las reuniones de más de 4 personas y dos grupos familiares como máximo, los restaurantes y similar siguen trabajando pero exclusivamente para delivery o pasar a retirar el pedido, incluyendo cadenas rápidas como McDonald’s. El turismo sigue existiendo, pero a una capacidad significativamente reducida, con muchas precauciones y muchos eventos cancelados. En mi caso, decidí no viajar pese a que está permitido, así que desconozco de forma directa cómo está la situación en aeropuertos y otros destinos.

-¿Qué es lo que más y lo que menos te gusta de vivir en Berlín?

-Me encanta la diversidad cultural que tiene la ciudad. Lo único malo, en mi opinión, es el invierno: es de noche a partir de las 15:45 hs ¡Pero es una oportunidad perfecta para ir a museos o similar!

Foto de Daniel Kravetz en Flikr

-¿Qué recomendaciones podrías darle a quienes estén considerando irse a vivir a Alemania?

-En lo posible, que aprendan aunque sea algo básico de alemán y que intenten no viajar en invierno. En cuanto a los trámites legales para conseguir una visa laboral son totalmente posibles de hacer por cuenta propia. Los tiempos varían muchísimo de persona a persona. Por ejemplo, la carta que tuve que recibir normalmente demora tres semanas en llegar a Argentina, sin embargo en mi caso demoró tres meses.

Más datos interesantes sobre cómo es vivir en Berlín 

Foto de Daniel Kravetz en Flikr

Daniel nos aporta información sobre algunos temas importantes, como cuál es el sueldo mínimo en Alemania,  qué canales utilizó para buscar trabajo desde Argentina y cómo es el proceso para conseguir un departamento a largo plazo, entre otras cuestiones.

  • Sueldo mínimo: “A partir del 2021 es de 9,50€ por hora”.
  • Cómo buscar trabajo: “En mi caso usé Honeypot.io y LinkedIn, ambas opciones son buenas”.
  • Transporte: “El transporte (incluye subte, tren, colectivo/micro, ferry y tranvía) cuesta 86€ por mes sin suscripción, 64€ por mes con suscripción o 807€ anuales con suscripción.
  • Servicios: “Normalmente se paga alquiler con expensas, separado del alquiler electricidad y/o gas, e internet. Algunos alquileres incluyen calefacción en las expensas (a un precio fijo), algunos departamentos no incluyen calefacción y termina siendo parte del costo de gas.

    Respecto de los costos, se estima en base a cantidad de personas, y tamaño de vivienda cuántos kWh se consumen por año, y se paga mensual. Al final de cada año se contrasta el consumo real versus el estimado. En caso de consumir de menos se devuelve la diferencia, en caso de consumir de más, cobran la diferencia, y en ambos casos se re-estima el consumo anual. No hay multas por consumir de más.

    En este momento estoy pagando 40€ por mes de electricidad, no tengo gas, y la calefacción está incluida en mis expensas”.
  • En qué momento buscar alojamiento: “Si la intención es venir con trabajo, sugiero buscar una vez que empiece el proceso de la visa laboral en la embajada. La mayoría de los empleadores pueden recomendar inmobiliarias para departamentos amoblados. En su momento, simplemente busqué por internet hasta encontrar un par de páginas que se dedican a esto”.
  • Cómo conseguir un departamento a largo plazo: “El proceso es inexplicablemente complejo y tedioso, porque la mayoría de los departamentos se muestran en visitas públicas a las cuales atienden a más de 60 personas, hay que presentar una lista de documentos que incluyen los últimos recibos de sueldo, prueba de no deber alquileres anteriores, contrato de empleo, seguro del hogar, y opcionalmente más documentos, pero es 100% en papel y presencial.

    Básicamente es suerte ser aceptado para un departamento, salvo algunas ofertas excepcionales que hacen visitas con pocas personas, o son departamentos para alquilar dentro de 2 o 3 meses”.
Autor

Jesica Rychter

Soy Licenciada en Ciencias de la Comunicación y periodista. Viajar y conocer nuevos destinos siempre fue mi motivación. Los atardeceres y los paisajes son mis postales preferidas.

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